15 Sep Las localidades mineras registran las pensiones más altas de Galicia
Localidades mineras como As Pontes, Carballeda de Valdeorras, O Porriño o Cervo, figuran entre los municipios gallegos con pensiones más altas en 2017, según refleja el informe sobre prestaciones de la Seguridad Social publicado por el Instituto Galego de Estatística. Se constata así la capacidad del sector minero de crear empleo estable y de calidad en entornos no urbanos. Este hecho, además, contribuye a fijar población y repercute en la generación de puestos de trabajo indirectos.
Entre las zonas en las que se cobran pensiones superiores a los 1.000 euros se mantiene en primer lugar As Pontes, con una media de 1.333 euros por beneficiario. Una vez más, la influencia de la central térmica de Endesa, con sus salarios y mejoras sociales, sitúa este municipio como el de las pensiones más altas de Galicia.
Cervo es otra de las localidades que, sin ser una de las grandes ciudades, registra pensiones por encima de los 1.000 euros, con un importe medio de 1.175 euros al mes. Sin duda la presencia de la empresa Alcoa, dedicada al refino de mineral, explica esta realidad.
Valdeorras
Especialmente significativo es el caso de Carballeda de Valdeorras. En Ourense, la provincia con las pensiones más bajas, es el único municipio con pensiones de más de 1.000 euros.
Limítrofe a él, O Barco de Valdeorras, aunque sin superar esta cifra, destaca también por registrar prestaciones contributivas entre los 900 y 1.000 euros. Es junto con la capital, Ourense, el único de la provincia en esta franja.
Se constata así cómo la histórica actividad minera relacionada con la pizarra en Valdeorras ha favorecido que sus jubilados cobren las prestaciones más altas de la provincia. En la mayoría de las demás localidades orensanas las pensiones no llegan a los 800 euros.
O Porriño
La otra gran área gallega de tradición minera vinculada a la piedra, el ayuntamiento pontevedrés de O Porriño, no llega a registrar pensiones por encima de los 1.000 euros, pero sí superan los 900. Se suma así también a las localidades gallegas donde los pensionistas tienen mayor poder adquisitivo.