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España es rica en minerales estratégicos, pero se los compra a China

Son muchas las industrias que se han visto paralizadas por la crisis mundial de materias primas: la automoción, las TIC, la producción de energías renovables y un largo atcétera. Una crisis protagonizada por la subida de los precios, los parones en la producción y los despidos, y que afecta también a empresas auxiliares y al bolsillo del consumidor final. 

La dependencia en ciertos materiales del gigante asiático lleva meses afectando a la industria española, una industria que podría emplear recursos extraídos aquí, donde contamos con 25 proyectos mineros paralizados y con yacimientos de materias primas marcadas como críticas por la Unión Europea, pero que o bien, no se explotan o bien, ni se han llegado a explorar. 

La potencialidad de España es tan grande que el jefe de área de recursos minerales del IGME afirma que “tenemos indicios de que en España puede haber yacimientos de 17 de los 30 minerales críticos”. Nuestro país es el tercero de Europa en cuanto a riqueza de recursos estratégicos y el segundo en tierras raras. Sin embargo, Europa importa el 95% de las tierras raras de China. 

Con el fin de detener esta dependencia y estar a la merced de mercados inestables, la Unión Europea fomenta la exploración y explotación dentro del continente. Una actividad que además de asegurar las cadenas de suministro, supondría un impulso para el empleo de calidad. “Explotar las reservas de metales en España supondría crear unos 20.000 puestos de trabajo e inversiones extranjeras de hasta 8.000 millones”, afirma Vicente Gutiérrez Peinador, director general de CONFEDEM.