02 Oct Varias supervivientes de cáncer se benefician de la práctica de piragüismo en el lago de As Pontes
El lago minero de As Pontes (A Coruña), que hace décadas era una mina de carbón, es hoy en día una extensión de agua de 8,7 kilómetros de longitud gracias a una ambiciosa restauración en un enclave en el que predomina el azul del agua y el verde de la vasta vegetación que lo rodea.
Se trata del lago artificial más grande de Europa, que no solo alberga un ecosistema único, sino también una oferta de ocio, bienestar y deporte. Ahora mismo es el punto de encuentro y lugar de entrenamiento de un grupo de mujeres supervivientes de cáncer de mama y pertenecientes al club pontés Náutico Folixa, y con el que la Cámara Oficial Mineira de Galicia (COMG) colabora desde hace meses.
Estas mujeres compiten en Barco Dragón, una modalidad de piragüismo con orígenes en Asia y con beneficios para mujeres que se están recuperando de un cáncer de mama.
«Remar juntas tiene muchos beneficios físicos, pero también psicológicos y de apoyo emocional», dicen. A las mujeres supervivientes de cáncer de mama el Dragon Boat les ayuda a prevenir la rigidez en el hombro, que conlleva a veces la extirpación del pecho, y a no dejar crear el lincedema.
La COMG promueve la extensión de esta práctica terapéutica deportiva en todas los lagos mineros y concellos mineiros de Galicia.