04 Abr Arigal colabora con la Xunta de Galicia en la gestión de áridos reciclados para fomentar la economía
- El objetivo es optimizar la valorización de las más de 700.000 toneladas de residuos de construcción y demolición generados al año en la comunidad.
- Así lo recoge un informe elaborado en colaboración con la Xunta de Galicia y la consultora Esmin Ingeniería.
La Asociación Gallega de Áridos (Arigal) colabora con la Xunta de Galicia en la apuesta por la gestión de áridos reciclados como fórmula para fomentar la economía circular en el sector, tal y como se recoge en un estudio realizado en coordinación con la consultora Esmin Ingeniería.
Presentado en un acto en Santiago ante un nutrido grupo de empresas de áridos y gestores de residuos y en el que también participó la subdirectora general de Residuos del Gobierno gallego, Verónica Tellado, el informe señala que el objetivo principal de esta iniciativa es optimizar la valorización de las más de 700.000 toneladas de residuos de construcción y demolición (RCD) que cada año se generan en Galicia.
La construcción y la demolición se encuentran entre las mayores fuentes de residuos en Europa y muchos de estos materiales pueden reutilizarse. Actualmente, los índices de reutilización y reciclado varían mucho entre los diferentes Estados miembros de la Unión Europea (UE), pero el sector privado está dando cada vez más pasos para reducir el impacto medioambiental de sus residuos.
“Enormes sinergias”
En Galicia hay 82 empresas gestoras autorizadas para la valorización de residuos de construcción y demolición, entre las cuales se encuentran productoras de áridos. La patronal del sector considera que existen “enormes sinergias” entre la fabricación de áridos naturales y reciclados, y las ventajas medioambientales son las más relevantes.
Esta integración de actividades permitiría una mejor rehabilitación de espacios afectados por la actividad minera, evitando la generación de vertederos, que cada vez están más penalizados en la UE. También permitiría aprovechar las explotaciones ya existentes, sin necesidad de habilitar nuevos espacios para el reciclaje de áridos.
En el plano medioambiental, la cercanía de los centros de producción y reciclaje de áridos de los centros de consumo también permite minimizar los impactos contaminantes generados por el transporte y el consumo de combustibles fósiles.