ÁRIDOS
ÁRIDOS
Un gran volumen de rocas obtenidas en Galicia tienen por destino la construcción de carreteras, hormigones y cementos; estas son conocidas como áridos. Se trata de rocas divididas en fragmentos que también son claves para industrias como la metalúrgica y la química. Son la segunda materia prima más consumida del mundo, solo por detrás del agua.
El árido es uno de los pilares de la construcción y se diferencia de otros materiales por su estabilidad química y su resistencia mecánica. Hay muchos tipos de áridos según su origen:
Los áridos naturales suponen un 90% de los áridos que se extraen para su comercialización. Proceden de depósitos detríticos de arenas y gravas, y de materiales más o menos disgregados y alterados por meteorización de granitoides y de otras litologías como areniscas, cuarcitas o pizarras. Presentan una forma redondeada, de superficies lisas y sin aristas.
La extracción de estos áridos se realiza directamente por medios mecánicos y apenas necesitan tratamiento a posteriori.
En Galicia existen zonas de interés para la obtención de áridos naturales:
Los áridos de machaqueo se producen en las canteras tras arrancar los materiales de los macizos rocosos y someterlos después a un proceso de triturado y molienda. Sus superficies son rugosas y angulosas. Son muchas las litologías, de distintos dominios geológicos, que se aprovechan como áridos de machaqueo: granitos, calizas y dolomías, cuarcitas y areniscas, anfibolitas, esquistos, gneises, gabros, migmatitas, cuarzo, pórfidos y peridotitas.
Son los resultantes de un proceso industrial o minero, o que han sido sometidos a alguna modificación físico-química de otro tipo. Son materiales de derribo, reutilizables y reciclables.